Si eres una persona que trabaja por cuenta ajena en una empresa que cotice a la Seguridad Social en concepto de formación profesional, dispones de hasta 200 horas/año para recibir formación acreditada oficialmente durante tu jornada laboral, previo consentimiento de la empresa.
Esto es posible gracias a los Permisos Individuales de Formación (PIF).
El objetivo del Permiso Individual de Formación es facilitar a los trabajadores la conciliación entre formación y trabajo, sin coste para la empresa donde presta sus servicios.
La Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo es un organismo público constituido para facilitar la gestión de las ayudas europeas y del estado para la formación profesional, y es el encargado de devolver el importe de tu sueldo y las cotizaciones devengadas a la Seguridad Social, durante el período de tu Permiso Individual de Formación.